Rosquillas de limón

Rosquillas de limón

Estas rosquillas son las mas clásicas, que se hacen en todas las casas para los niños la merienda. 

Son las típicas que hacían las abuelas para agasajar a los nietos cuando íbamos a visitarlas.

Son suaves y tiernas, ideales para merendar con un buen chocolate caliente o para tomar en el desayuno. 

Espero que las probéis, son fáciles de hacer y os pueden ayudar los niños a prepararlas, una tarde fresca de otoño o invierno y así los tenéis entretenidos, a la vez que conseguiréis que se aficionen a la cocina. 



Además, siempre mejor acostumbrar a los niños a una merienda casera y mucho más sano que la bollería industrial. 

Sí encima dejáis que ellos os ayuden, se las comerán con más gusto y tendrán un bonito recuerdo que contar.

Ingredientes para dos docenas, 24/25 unidades, si las hacéis más grandes, os saldrá alguna menos.

- 3 huevos grandes a temperatura ambiente.

- 9 cucharadas de azúcar bien llenas

- 9 cucharadas de aceite de oliva (previamente refrito con una piel de limón para que no sepa a crudo y dejamos enfriar antes de usar)

- 2 sobres dobles de gaseosas o dos cucharadas grandes de levadura química tipo Royal

- la ralladura de 1 limón y su zumo colado

- 650g de harina de repostería o harina todo uso aprox.

1. * No usar la harina que venden para bizcochos que ya lleva gasificantes, no es lo suficientemente fuerte y se os desmorona la masa al freir.

Como hacer:

Batir los huevos con el azúcar y el aceite hasta que estén cremosos (ésto lo podemos hacer con varillas) quedará cómo una mayonesa ligera.

Añadir el zumo y la ralladura del limón y mezclar bien con una cuchara de palo o una lengua de goma.

Tamizar la harina en un barreño. 

Añadir la harina a los huevos poco a poco, a puñados 
y vamos mezclando suavemente, 
cuando echemos dos puñados añadir el tercero junto con las gaseosas mezcladas.

Mezclar bien y cuando este manejable, poner sobre la mesa de trabajo y amasar un poco.

TIENE QUE SER UNA MASA BLANDA PARA QUÉ QUEDEN TIERNAS, QUE RECUERDA LA MASA DE PAN.

Cubrir con un paño húmedo o un film y reposar durante 20/30 minutos.

Calentar abundante aceite y mientras éste se va calentando, ir cogiendo pequeños trozos de masa, del tamaño de una pelota de pimpón o cómo un huevo pequeño.

Ésto les encanta hacer a los pequeños de casa, disfrutar ayudando en su elaboración.

Estirar como un churro y unir las puntas, para así formar las rosquillas. 

Con presionar un poco ya se queda pegado. 

Cuando este el aceite caliente pero no humeante, a unos 160/170º, ir friendo de pocas en pocas y que no se os doren demasiado. 

Yo recomiendo hacerlas de cuatro en cuatro, así las podemos dar la vuelta con facilidad con dos tenedores.

Cuidado no se quemen pero que tampoco se queden crudas por dentro. 

TRUCO: Yo suelo freír una primero para hacer la prueba de temperatura y sabor. 
VER CUANTO TARDA EN PONERSE DORADA Y LO QUE CRECE AL FREIR.

Cuando esté el aceite a la temperatura adecuada, vamos friendo por tandas, sacar, escurrir sobre papel y antes de que se enfríen, pasar por azúcar. 

Ojo, dejar enfriar antes de comer, por lo menos siempre se ha dicho que las rosquillas calientes son indigestas y dan dolor de barriga ¿?. 
Buen provecho.