Rosquillas de "San Blas" de Valdemorillo

Rosquillas de “San Blas” de Valdemorillo
 

Todos conocéis una de mis debilidades, los dulces antiguos y tradicionales. 

Acercándose una de las épocas del año donde más dulces tradicionales se han hecho toda la vida “la Semana Santa” 
os quiero dejar algunas recetas de éstas que tengo guardadas como un tesoro.

Algunas muy populares y otras prácticamente desconocidas por la mayoría pues son recetas locales. 


Uno de los dulces por los que tengo especial debilidad “por los recuerdos a mi niñez” son los clásicos dulces de sartén 

y entre todos ellos, los famosos roscos y rosquillas.

¿Quién a lo largo de su vida no ha comido alguna rosquilla? 

¿Sabíais que nuestras deliciosas Rosquillas son el predecesor de los famosos donuts?

¿Qué los conquistadores Españoles, las llevaron "a todos los puntos del mundo" donde se siguen elaborando roscas fritas?

Sí, os digo que tengo posiblemente 150 recetas diferentes de esta variedad de dulce

Vais a pensar que estoy loca o que soy una exagerada (pero no, no estoy loca)

Me pasa igual que las recetas de magdalenas, sitio donde voy roscas o magdalenas que pruebo e intento guardar su receta.

Me encanta que me den recetas de éstas y muchos amigos ya saben que regalarme cuando viajan.

Me traen todas las que pueden reunir (eso es vicio puro y lo demás es tontería) jajajajaja.

* Si no me creéis, os dejo una “pequeña muestra” de las muchísimas recetas que tengo de roscas, algunas ya publicadas y muchas, muchiiisimas pendientes de  publicar.

En cada pueblo prácticamente se hacen distintas, aunque la gran mayoría están elaboradas con ingredientes cotidianos, cambiando sólo el sabor:

Las hay de anís; de limón; de naranja, de vino, 
de manzana; de nata, de todo lo que se pueda imaginar. 

Aquí os dejo una pequeña lista:

-rosquillas de las ánimas;

-roscas de candil; 
-roscos secos de ron o de vino;

-rosquillas de queso; 
-de diferentes especias: canela, clavo, hinojo, semillas de cilantro; etc.

-Roscos de nuez; avellanas; de almendras; 
de harina de maíz;

-de hojaldre hay también muchas diferentes como las clásicas de Alcalá; 

-rosquillas fritas Toledanas (parecen dobles);

-riquísimas rosquillas de Huesca; 

-las llamadas al bulto de Cáceres;

-roscas floras Extremeñas;

-de San Isidro en Madrid hay tres:
las clásicas tontas, las listas que son las De Santa Clara y las francesas que son fritas; 

-las riquísimas rosquillas de San Leandro Asturianas;

-Roscos de San Antón patrón de los animales y las deliciosas de especias para San Sebastián;


-roscos Sevillanos de almendra;

-rosquitos al horno de Córdoba;

-roscas del buen paladar de Almería;

-las roscas de aceite extremeñas y de Ciudad Real; 

-roscas de ajonjolí también de Córdoba;

-las rosquillas de Santa Lucia típicas en muchos pueblos del norte de España y de Europa;

-las de Santa Teresa en Castilla y León;
-las de Santa Águeda en Bilbao;

-las de San Blas que hoy os traigo que se hacen en diferentes pueblos; 

-las rosquillas fritas de San Pedro; 
-las secas de San Agustín; 

-las de aguardiente de Málaga; 

-las de Andevalo de Huelva;
-las de San Marcos; 

-las roscas gaditanas de Cádiz;
-las Clásicas rosquillas de monjas "Monasterio"; 

-las roscas de manteca; 
-las de coco; 

-los donuts que al fin y al cabo son rosquillas fritas; 

-las de Melilla; 
-las deliciosas roscas de Canarias; 

-las de San Antonio de Granada; 

-las antiguas roscas de patata andaluzas
"esto es para que mi querido amigo Jose Luis de Aisha Kandisha no se vuelva loco, jejejejeje, el ya me entiende";
-las roscas de gachas;

-----*rosquillas de mi abuela que ésa es receta muy antigua ya que era de su abuela;

Asi un largo etcétera, no se cuántas he nombrado pero aún me faltan muchas muchísimas más.

Prácticamente todas las Santas y Santos que hay y se celebran en el calendario Español, puede que tengan una receta diferente de rosquillas y un largo larguísimo etc.… 


 ------LAS SUBRAYADAS PODÉIS ENCONTRARLAS YA PUBLICADAS aquí EN EL BLOG, POR SI OS ANIMÁIS A CONOCERLAS.


Encima, desde que tengo el blog, revisando vuestros recetarios he descubierto algunas más que desconocía;

O sea, que quizás tendría para escribir varios libros solo de recetas de roscas ¿que opináis?

 ¿tendría que escribir una guía de las rosquillas? jajajajajaaja.

He pensado que como tengo tantas, cada año os voy a ir poniendo algunas diferentes, así "de vez en cuando" para no cansaros y elegís las que más os gusten.

Os aseguro que aunque tengan ingredientes muy parecidos, cada una tiene su toque diferente, unido a una historia. 

* En el blog ya tengo algunas:  
en etiquetas las encontrareis todas en roscos y rosquillas o en dulces de sartén.

y también encontrareis diversos dulces tradicionales,
casi todos recetas antiguas heredadas.

Bueno, después de este larguísimo rollo, aquí os cuento lo que yo sé sobre las Rosquillas de San Blás.


     HISTORIA DE LAS ROSQUILLAS DE SAN BLAS 

El 3 de febrero se celebra segun el santoral católico “SAN BLAS” patrón de la garganta.

Aquí en Valdemorillo, Madrid, es el patrón y junto a La Candelaria que es el 2 de febrero, se hace la fiesta mayor. 

Aparte de fiestas también se sigue haciendo un concurso de bailes tradicionales: El Rondón.

Me imagino que se seguirán haciendo en muchas casas estos roscos tradicionales,
 lo que no tengo claro es que se sigan llevando a bendecir;

*He intentado informarme de esta tradición con el señor cura de Valdemorillo y las dos veces que he ido a visitarle ha tenido que salir y no ha podido atenderme, asi que lo desconozco,
 pero seguiré intentando hablar con el para documentarme.

Esta receta junto a otra muy parecida "pero de roscos fritos", me la dio una señora de Valdemorillo que ya falleció
 la señora Carmen López Partida, nativa de este pueblo y madre de una antigua vecina mía Mª Carmen.


Le dedico con cariño esta entrada, ya que fue ella la que me contó también la historia de éste santo que yo desconocía
 y la tradición que seguían en su juventud de hacer y llevar a bendecir las rosquillas.

Fuera de la tradición de Valdemorillo, también se hacen rosquillas para San Blas en otras localidades españolas,

y tambien se bendicen unos cordones que se usan a modo de collar para prevenir las enfermedades de garganta,


 de ahí el hecho de llevar las rosquillas a la “misa del patrón” cogidas con una cinta,
 para después anudársela al cuello y se mantiene alrededor de la garganta durante 9 días para al final quemarlo.

                              

La celebración de su fiesta que es "patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad" desde 2009

También se celebra en numerosas poblaciones de España y del extranjero, Europa y América.

Es un santo muy venerado y patrono de varios países y numerosas localidades.
 

Si queréis conocer algo más sobre los distintos pueblos donde se sigue ésta tradición de estas rosquillas
 (increíble pero son muchísimos por toda España) o la vida de este santo,
 os recomiendo visiteis esta página de Wikipedia y leáis todo lo que cuentan:

Historia de San Blas

Yaaaaaaaa, ya sé que me he enrollado hoy mucho pero ya esta aquí la receta:

Ingredientes para unas 24, son rosquillas grandes.
 -yo he usado la mitad de la receta y he hecho 12,
 que tengo por casa aún más dulces que comer. Si queréis vosotros hacéis igual para probar.

- 600 g de harina normal todo uso (yo 300g)

- 6 huevos, las claras separadas de las yemas (yo 3 pero de los gordos)

- 100 g de azúcar (yo 50g)

- 100 ml de aceite de oliva suave (yo 50ml)

- 1 copita de anís (yo media copita más un chupito que dejo aparte para el glaseado)

- una cucharada de bicarbonato (yo una pequeña pero bien llena)

Para el glaseado haremos cómo un merengue "suizo":

- 300 g de azúcar glas tamizada (yo 150g)

- 3 claras reservadas (yo 1 y un poco)

- un chorrito de anís que medimos aparte.

Como hacer: 

Primero separamos las yemas de las claras, dejando en un bol aparte: una clara más un poco de otra, que vamos a necesitar para después el glaseado.

Yo lo hago fácilmente con la mano bien limpia.

Batimos los huevos junto con el azúcar hasta que estén muy esponjosos y no notemos el granillo del azúcar.

Ésto parece una tontería pero si disolveis bien el azúcar se quedan mejor las masas, comprobarlo cogiendo un poco entre los dedos.

                                                            

Le añadimos el anís.

Batimos y le echamos el aceite poco a poco como si estuviéramos haciendo una mayonesa para mezclar bien los ingredientes.

                                           

Le incorporamos la harina mezclada con bicarbonato tamizándola poco a poco.
  

                                            

Nos tiene que quedar una masa que podamos trabajar pero no muy blanda. Si habéis hecho alguna vez galletas, la textura de la masa es igual.

Si tenemos que añadir un poco más de harina lo hacemos pero nunca poner más de 50g
 (siempre todo depende de la humedad de la harina y del volumen de los huevos, por eso no es una medida exacta,
 yo la he pesado para saber aproximadamente cuánto poner, pero según me dijo la señora Carmen, la harina que pida la masa.

Sacamos la masa sobre nuestra encimera y la trabajamos bien, que estén los ingredientes bien unidos, que no se vea harina sin mezclar, pero sin amasar mucho para que no salgan duras.

Nos tiene que quedar una masa que se estire bien suave, pero no dura ni pegajosa.

Para hacer las rosquillas nos untamos las manos y la encimera con un poco de aceite para evitar que se peguen.

 Dejar reposar la masa unos minutos cubierta con un paño limpio.

 
Cogemos porciones de masa del tamaño de un huevo, es fácil si hacemos con la masa un largo churro que dividimos en doce trozos.

 Hacemos de cada uno unas tiras rodando la masa sobre la encimera y las unimos por sus extremos a gusto de cada uno.
 
Son roscas grandes y que al cocer crecen más grandes que una mano, ponerlas separadas para que no se peguen

 por esto yo no suelo poner más de 6 en cada bandeja

*clásica de horno

                                                            

Las colocamos en una bandeja de horno engrasada (yo suelo poner sobre un papel de hornear) 

Caben 6 en cada bandeja.

                                      

Cuando hayamos finalizado las rosquillas, metemos las bandejas al horno precalentado a 170º durante veinte minutos aproximadamente ARRIBA Y ABAJO SIN AIRE.



Yo al usar dos bandejas diferentes, a mitad del tiempo las cambio de altura para que se hagan por igual.


Mientras se hornean preparamos el glaseado batiendo ligeramente las claras con la pizca de sal, no hay que montarlo, sólo romper la textura.

Hacerlo en un bol grande que aguante el calor del baño María.

                

Ponemos también el poco de anís reservado y mezclamos.

Echar el azúcar y poner el bol al baño maría a fuego muy bajo, mejor si el agua de abajo no llega a hervir.
 procurando que nunca toque este bol el agua.

Y sin dejar de remover, vamos mezclando el azúcar glas. Lo mismo que antes, mezclar con cuidado, no montar.

                     

Removemos hasta que este disuelto el azúcar.

Quitamos del calor y ahora ya batimos hasta que tenga consistencia de punto de nieve flojo. La textura es una glasa real, mucho ojo con las burbujas de aire que luego afearan las roscas cuando sequen

                                                     

Cuando estén doradas las rosquillas las sacamos del horno y quitar de la bandeja.

Con mucho cuidado, pues queman y siguen un poco blandas, si es necesario cogerlas con una paleta; 

asi que tener mucho cuidado al manipularlas, luego segun enfrían se van endureciendo. 

Dejamos que templen durante 3-5 minutos y con precisión bañamos por un lado en la glasa de merengue que teníamos preparado.

Las dejamos secar en un lugar templado, mejor si es sobre una rejilla con papel de horno debajo.

Antes se dejaban secar cerca del calor del horno o de la chimenea "pero sólo cerca, no dentro"
 así no se resquebraja el glaseado al endurecer poco a poco, quedando una textura crujiente y brillante.


Como hemos hecho la glasa de merengue con azúcar glas, mejor dejar secar en lugar templado.

Bueno, después de esta entrada tan larga, espero que empecéis a hacer vuestros dulces tradicionales.

El bendecir o no éstas rosquillas  es vuestra elección,
 como ya os he dicho antes era la tradicion para que nos cuidara la garganta; 


Pero si que os recomiendo que las probéis,
 veréis que son parecidas a las de San Isidro pero a la vez son diferentes.

A mi personalmente me han gustado mucho y las pienso repetir "aunque no sea San Blas".

EDITO:
SE conservan perfectamente mucho tiempo, incluso más de un mes si se guardan en un lugar seco y oscuro.

EDITO DE NUEVO:

Estas roscas las ha hecho Jose Luis, mi querido amigo de Aisha Kandisha, y le han quedado de cine.

Gracias precioso por animarte a probarlas, por todo lo que me dices en tu entrada, ya sabes que yo también te admiro mucho y estoy muy agradecida por nombrarme.
 Jodío, sí te han quedado mucho más bonitas que las mías, jajajaja, pero en el glaseado se te a olvidado echar el azúcar y el anís...... 
Muakkkkkkkkkkkkkk. 

http://aishakandisha.com/2015/03/rosquillas-de-san-blas.html

 http://aishakandishablog.blogspot.com/2015/03/rosquillas-de-san-blas.html?m=1
                        

Un abrazo y la siguiente receta también será tradicional. 

EDITO DE NUEVO:
 Éstas fantásticas rosquillas, las ha hecho Lidia del blog Atrapada en mí cocina

 y no tengo palabras para agradecerte el haber hecho una de mis recetas y nombrarme. 

 Que bien te han quedado.
 Me alegro mucho de que te gusten.
Un beso dulce.

https://www.atrapadaenmicocina.com/2017/01/rosquillas-de-san-blas.html?m=1

En cuanto pueda os enseñaré la foto, podeis verlo entrando en su blog con el enlace de encima.